Ser feliz es tan fácil que a veces da miedo darse cuenta de lo cerca que teníamos todo lo necesario...
Es fácil, es tan fácil que asusta y da vértigo y hasta te enfadas por no haberte dado cuenta antes de que podías haberte ahorrado tantas historias...

La felicidad es simplemente ser consciente de que siempre hay una sorpresa más a la vuelta de cualquier esquina. Y nosotros, que miramos el mundo con ojos de niño, lo sabemos.
Nuno, amigo mío, este deseo es para ti: sé tan feliz como mereces... Y da siempre más de lo que recibas. Me alegro infinitamente por vosotros.

Advertencia

Mientras el otro 50% de este blog descansa en su ladito del mundo, yo aprovecho para invadir nuestro espacio a traición con mis floripensamientos veraniegos... Y no admito que se me lleve la contraria ;)
Él es el poli bueno, yo la mala. Y me encanta.

¿Cuba libre?

Dicen que viajar te abre el espíritu y te proporciona nuevas perspectivas. Pero, a veces, viajar sirve para valorar más lo que tienes en casa... Desde luego, la que firma no piensa volver por La Habana hasta que el amigo Castro esté criando malvas en lo más profundo de un hoyo...
Y así termina la primera parte de mis vacaciones. ¡Snif!